domingo, 15 de enero de 2006

Lo que nunca pense llegar a ser

Sin darme cuenta como sucedió todo, porque pasó de pronto, yo ya estaba sentada en un local con una luz azul neon y enfrente de mí una michelada. En ese momento comienza el performance de las citas aunque esto no lo era, sino más bien un recuentro con un pasado ya comprometido.

Siguiendo la charla, los modales, los atrevimientos… de pronto me tenía justamente enfrente de mí, observándome. Y abría los ojos cada vez más a la par que me iba escuchando.

Y no supe cuando mis argumentos cambiaron y ese era mi discurso. Hace un año creía que lo que quería era una relación estable, un estate quieto por un rato, el madurar en pareja. Ahora 365 días después, digo que no creo en los compromisos, no quiero algo estable y que ahora todo se vale, estar o no estar.

Sin duda a veces la vida te pone en caminos que si tímidamente aceptas pueden cambiar toda tu ideología y la base de lo que tú creías, de lo que partías. Es decir, terminas siendo lo que nunca pensaste ser.

No hay comentarios:

Publicar un comentario