viernes, 7 de mayo de 2010

De fondos y formas.

La premisa general es que las formas son fondos materializados, discursos que emergen en acciones. Los fondos son intangibles y se nutren como lo señalé antes, del discurso. El discurso es el contenido de valores, creencias, idiosincracias, cosmovisiones que definen para cada individuo lo correcto, lo permisible, lo abominable, lo intolerable, lo qué uno es y lo que no quiere ser. Las formas por ende, son los rituales, las tradicciones, las costumbres, los hábitos.

No existe forma sin fondo y viceversa, pero la segunda premisa no asegura que la relación entre ellas sea equilibrada.

Por lo que creo que cuando una forma se sobrepone al fondo, el resultado es la demagogia. Y cuando existe un fondo sin formas, no tenemos más que una auténtica utopía.

No hay comentarios:

Publicar un comentario