Cinco cosas

Una cosa…

A veces me da coraje no poder estar con mis amigos cuando me necesitan, aunque sea para darles un abrazo. Pero que le hago, la mayoría no vive aquí, sino en otras ciudades, otros estados y hasta en otros países. Ni modo, a sobrellevar la amistad por medios no presénciales.

Dos cosas…

La otra vez hice uso práctico de la tecnología. Una prima necesitaba ayuda con un texto en inglés para una tarea y obvio no vive acá. Necesitaba leerlo y luego responder unas preguntas. Traducirlo de manera escrita me hubiera tomado una eternidad, por aquello de colocar correctamente las expresiones. Mejor hicimos una cyberllamada y mientras leía iba traduciendo.

Tres cosas…

Solicito pareja para fiesta graduación. Los requisitos: que le guste bailar y que sepa, que sea una persona de mente abierta, no le tenga miedo a mi papá, y que su mamá lo deje quedarse a dormir en mi casa, por aquello que no maneje a altas horas de la madrugada a su casa.


Cuatro cosas…

Después de varios años sin actividad física me metí a clases de natación. Ya me ven, con todo el outfit, me siento toda una deportista jajajaja. Creo que le voy a caer mal al instructor por fresa, pero que le hago cuando me junto con Iván se me pega.

Cinco cosas...

Hace pocos días me sucedió algo inusual, para ser exacta el día del padre, que por cierto ni al mío felicite, estaba en el laburo y luego ya llegué tarde a la casa. El caso es que me dieron tremendas ganas de ser mamá, como nunca en la vida y de tener un marido lindo. No se asusten, es porque veo que mis compañeras de trabajo (varios años más grandes que yo y felizmente casadas) están felices con uno y se me antoja, pero bueno, eso se quita fácil, cuando llego a mi casa. Jajaja.