viernes, 23 de abril de 2010

No disponible

Disculpe las prisas pero hoy atiendo lo cotidiano, las cosas mundanas de la vida.
Me encantaría quedarme pero no puedo, sepa usted que los asuntos cotidianos corren más de prisa, a veces más rápido que el segundero del reloj.

Perdón, es una pena no hacer una pausa, pero hoy le toca a lo básico justamente a lo que siempre se tiene que hacer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario