Hoy me como mis palabras,
y deshebro las historias.
Camino bajo la bruma de
está ciudad extraña que revolotea a mi espirítu.
¿Estoy o no estoy?
No me siento en tierra, no me siento real.
Me como mis palabras,
me como mis historias,
me como a mí misma...
y desaparezco, y me pierdo...
Todavía tengo hambre.
Viajo dentro está ciudad extraña
en un vagón perdido que anda sin mi.
No te pierdas en los caminos de la memoria y el recuerdo, que son traicioneros y están llenos de espinas.
ResponderEliminarSi son unos pasos atrás que sean para un gran salto adelante.
Hola Jorge... muchas gracias por tus comentarios.
ResponderEliminarPero sabes... no hablo del pasado, hablo del presente.
De las palabras de ahora, de las historias de ahora.
El comerme las palabras.. va màs asociado a una cuestiòn de silencio ante una situaciòn que es màs grande que yo.
Por ahi iba. Pero gracias por el consejo.